Según FUENTERS SOLVENTES, la orden del ministerio del Interior llegó la tarde del domingo, tras comprobar que la situación en Marruecos era más delicada de lo que a priori se calculaba. Los episodios violentos en Rabat y Casablanca, unidos al hecho de que varios activistas hayan anunciado su intención de abandonar el país, han puesto en alerta al Gobierno.
La Policía Nacional ya informó el jueves a la Delegación del Gobierno de Melilla y al Ministerio sobre las revueltas programadas para el fin de semana, pero el viernes ambos organismos descartaron enviar más efectivos a las fronteras de Ceuta y Melilla.
Desde el primer momento, la Policía ha reclamado la colaboración de las Unidades de Intervención Policial de Málaga y Granada, ya que el objetivo prioritario, según confirman aECD fuentes policiales, “es frenar las posibles oleadas de personas procedentes de Marruecos que intenten entrar en territorio español”.
Finalmente, los informes enviados a Delegación del Gobierno e Interior han tenido su respuesta, y más de 90 agentes antidisturbios procedentes de la Península llegaron ayer a Ceuta y Melilla para reforzar la seguridad en las fronteras con Marruecos.
El Gobierno “quita hierro” a las revueltas en Marruecos
Las fuentes consultadas por este diario señalan que “Interior conocía desde finales de la semana pasada que iba a haber importantes revueltas en Marruecos, pero le dieron poca importancia”. No obstante, el desarrollo de los acontecimientos ha provocado un cambio de estrategia: “Ahora sí quieren reforzar la seguridad aunque públicamente continúan quitando hierro al asunto”.
Estas acusaciones están relacionadas con las palabras que ayer pronunció Trinidad Jiménez sobre las revueltas en el país vecino. Pese a la confirmación oficial por parte de Marruecos de la muerte de cinco manifestantes el pasado fin de semana, la ministra de Asuntos Exteriores ha“celebrado” que las revueltas en Marruecos y Argelia se estén desarrollando sin "incidentes graves".
Ha advertido, además, que "corresponde a los propios Gobiernos decidir si van a iniciar algún tipo de conversación o de proceso de diálogo con las fuerzas políticas de la oposición" para impulsar reformas ulteriores.